Si el aire se refrigera a una temperatura muy baja, se transforma de un vapór en un fluido. Cuando sube su temperatura, se convierte de nuevo en un gas.
El gran cuidado debe ser empleado en ejercer este experimento.
¿Necesitas tener más consejos extra (https://www.cosmohomes.es/noticia/nieruchomosci-costa-blanca/8547/1/)? Te encuentras en un sitio adecuado. En nuestra página web hemos preparado para ti muchos posts curiosos.
Los tres iniciales vápores para hervir y vaporizar (nitrógeno, oxígeno y argón) representan el 99,95 de porcentaje de contenido de aire. Puede parecer como si todo el aire desapareciera después de que el oxígeno se evapore, pero no es así.

Después de que el oxígeno vaporiza, una escasa cantidad de aire líquido permanece. Ese aire contiene otros gases provenientes de atmósfera. Uno de citados gases es xenón. Ramsay y Travers reconocieron por primera vez la existencia de xenón en aire líquido el 12 de julio de 1898. Lo llamaron ‘xenón’ de la expresión del idioma griego que denota “misterioso”.
La aplicación principal de xenón es en iluminación. Cuando una corriente eléctrica pasa por un gas, puede producir la luz. Los focos fluorescentes y las luces de xenon para autos sirven como ejemplos de este evento. La clase y el color de la luz producida depende del gas utilizado en la lámpara. Xenón se vuelve útil cuando necesaria es una iluminación muy fuerte, como la del sol. Por ejemplo, la luminosidad refulgente de los faros xenon empleados por los productores de los coches hace los faros xenon un componente indispensable en los coches contemporáneos.
Las luces ultravioletas que se emplean para esterilizar el material laboratorial igualmente pueden contener xenón. La luz producida es bastante brillante para exterminar los microbos. Xenon también tiene su aplicación en la producción de las luces estroboscópicas. lámpara estroboscópica genera una luz muy brillante y intensa en pulsos breves. Las lámparas estroboscópicas parecen “helar” el desplazamiento de una cosa. Autor